Volkswagen adelantó el primer GTI eléctrico en el Salón de Múnich, con modos de manejo que imiten el sonido de los modelos clásicos. La historia del GTI está escribiéndose en este preciso momento, pues ahora que Volkswagen atraviesa un momento de reinvención, ya se plantea un futuro modelo eléctrico.
El primer EV con el emblema de GTI es todavía un concepto, pero la Volkswagen ya confirmó que hay una versión de producción en desarrollo.
Este GTI eléctrico está basado en el ID.2all Concept que se presentó hace meses y es un adelanto estético de lo que Volkswagen plantea para el futuro, pues no hay aun una propuesta mecánica concreta. Solamente sabemos que hay un motor en el eje delantero y un diferencial de derrape limitado, que seguramente entreguen más de los 228 hp que promete el ID.2all más básico, con el que acelera a 60 mph en menos de siete segundos.
La marca alemana también muestra lo que ellos llaman el GTI Experience Control, con el que se puede calibrar el auto a través de la electrónica con el tacto de dirección, sonido y entrega de potencia del GTI original de 1976 o del MkII de 16 válvulas, con algunos cambios de marcha simulados.
La clásica pelota de golf en la palanca tiene una reinterpretación, pues no sirve para cambiar de marcha porque este se encuentra en la columna de dirección, pero sí sirve para el GTI Experience Control, desde donde se ajustan las pantallas y los modos de manejo, que en Vintage, por ejemplo, configura el cuadro digital de 10.9 con el aspecto del análogo en el primer GTI.
Estética retrofuturista
Afortunadamente, el diseñador del ID.2all, Andreas Mindt, aseguró tener en mente a este GTI cuando diseñó el modelo original. Las líneas tienen carácter y se realzan por los toques tradicionales del GTI, partiendo de la parrilla inferior de panal, los faldones laterales y los pasos de rueda ensanchados, con un alerón posterior en la tapa de la cajuela y un difusor más agresivos que en el ID.2all.
Volkswagen no escatimó en logos de GTI para el primer eléctrico de la familia, pues los hay en la fascia delantera, puertas, faldones y hasta en los rines, sumando al tradicional de la compuerta trasera. La sección negra en la parte baja de la fascia delantera es un guiño al GTI original, pues está pintada en negro como el difusor del modelo de los setentas.
Otros detalles, como los faldones, el contorno de la ventana trasera y la parte baja de la defensa posterior también están pintados en negro y junto con el detalle segmentado debajo de las luces traseras evocan a las defensas de plástico negras de los GTI MkI y de los primeros MkII. En la nariz, tiene la franja de color rojo flanqueando la parrilla y rines de 20 pulgadas inspirados en los de los Golf GTI de hace 40 años.
Volkswagen le da una cabina a la altura al primer GTI eléctrico
Por dentro también toma influencia de los modelos clásicos, pues la tela de los asientos se llama Jack-e, en referencia a la tela Jacky del GTI MkVI. El volante es exclusivo y está inspirado en el del original, aunque con fondo plano y la leyenda de GTI en el radio vertical.
El concepto tiene un head-up display de realidad aumentada que abarca todo el parabrisas, para que la información sea visible para todos y no solo para el conductor. En el modo GTI, las luces ambientales cambian a rojo y se incluye en el HUD la información de la pista en cuestión y de la vuelta.
Es interesante que Volkswagen haya elegido a este ID.2all como base para el primer GTI y no al ID.3 que ya está en producción, aunque también tiene lógica, pues este es de tracción delantera como el original, mientras que el ID.3, que también es más grande y pesado, es de propulsión posterior.
