El Gran Premio de Estados Unidos marcará un hito especial para Mercedes-AMG: será el despliegue número 500 del Safety Car de la marca desde su debut en el Gran Premio de Francia de 1996, disputado en Magny-Cours.
Aquel 30 de junio de 1996, un Mercedes-Benz C 36 AMG encabezó por primera vez la parrilla bajo bandera amarilla. Desde entonces, trece modelos distintos —de Mercedes-Benz y Mercedes-AMG— han garantizado la seguridad en los circuitos del mundo. Hoy, la Mercedes-AMG GT Black Series cumple esa tarea, compartiendo protagonismo con la Fórmula 2, Fórmula 3 y otras categorías de soporte.
El experimentado Bernd Mayländer ha sido el rostro constante de este servicio desde el año 2000, acompañado por sus copilotos Richard Darker e Ignazio Sanzone. Cada fin de semana de carrera, tres vehículos oficiales están disponibles para la F1, con dos unidades permaneciendo en el circuito.
Para conmemorar este logro, el Safety Car de Austin lucirá una decoración especial con el número 500, símbolo de casi tres décadas de compromiso con la seguridad en la máxima categoría.
500 intervenciones que definieron la historia moderna de la F1
El coche de seguridad se despliega por orden de dirección de carrera en casos de peligro —accidentes, escombros o lluvia intensa— y neutraliza temporalmente la competencia mientras lidera al grupo a velocidad controlada.
Más allá de su función principal, el Safety Car también influye en la estrategia, ya que las detenciones en boxes durante estas fases reducen considerablemente la pérdida de tiempo.
En sus 500 apariciones, el coche de seguridad de Mercedes-AMG ha acumulado registros notables:
- São Paulo 2016: 33 vueltas bajo neutralización, en cuatro intervenciones.
- Fuji 2007: la fase continua más larga, con 19 vueltas seguidas bajo intensa lluvia.
- Canadá 2011: la carrera con mayor número de apariciones, con cinco despliegues.
“Estuve en pista durante 19 vueltas, vigilando el indicador de combustible, y cuando la lluvia amainó, cambiamos de coche para volver a salir tras otro accidente. Fue una carrera inolvidable”, recordó Mayländer sobre el caótico Gran Premio de Japón de 2007.
Casi 30 años de confianza en la estrella de tres puntas
“Estamos orgullosos de esta larga colaboración y de la confianza que la FIA ha depositado en nosotros para contribuir activamente a la seguridad del automovilismo de élite con nuestros productos de alto rendimiento”, declaró Christoph Sagemüller, director de Mercedes-AMG Motorsport.
“Bernd Mayländer ha sido un compañero experimentado y de confianza en nuestro equipo durante muchos años”, añadió el ejecutivo.
Con 500 apariciones en su historial, el Safety Car de Mercedes-AMG no solo simboliza tres décadas de evolución técnica y compromiso con la seguridad, sino también una presencia inseparable del ADN de la Fórmula 1. Y aunque el futuro podría traer vehículos híbridos o totalmente eléctricos a este rol, el legado de Mayländer y de la estrella plateada parece asegurado por muchas temporadas más.