El repentino despido de Christian Horner como jefe de equipo de Red Bull Racing no solo ha sacudido los cimientos de la Fórmula 1, sino que también podría resultar en una millonaria indemnización. Según reveló The Telegraph, los abogados de Horner ya están negociando un posible pago completo de su contrato, que se extendía hasta 2030.
Aunque Red Bull no ha ofrecido explicaciones oficiales sobre su salida, los números detrás del acuerdo son contundentes. Horner firmó un nuevo contrato en 2023 con un salario base que rondaba los 12 millones de dólares anuales. Sumando bonificaciones por rendimiento, como el título de pilotos de Red Bull en 2024, se estima que el valor total del contrato podría alcanzar los 89 millones de dólares. De concretarse la indemnización completa por los cinco años y medio restantes, el monto ascendería a unas 66 millones de libras esterlinas (aproximadamente 89 millones de dólares).

El factor Verstappen
Más allá de las cifras, el trasfondo político en el equipo austriaco parece haber sido determinante. Guenther Steiner, exdirector de Haas F1, sugirió que las tensiones con Jos Verstappen, padre del tricampeón del mundo Max Verstappen, fueron clave en la salida de Horner.
“Hubo críticas abiertas”, declaró Steiner a talkSPORT. “Jos criticó directamente a la directiva de Red Bull, sobre todo a Christian. Max es el mejor piloto actualmente y tiene mucha influencia en el equipo. Sin duda, eso influyó en la decisión”.
La relación entre Horner y el clan Verstappen se tensó desde marzo de 2024, cuando Jos advirtió que “Red Bull explotaría” si Horner seguía al frente. El propio Max, a pesar de tener contrato hasta 2028, no ha confirmado su compromiso a largo plazo. Hoy ocupa el tercer lugar en el campeonato de pilotos, a 69 puntos de Oscar Piastri.

Turbulencias internas
La salida de Horner se suma a una etapa convulsa para el equipo. Pese a haber sido absuelto de dos investigaciones por conducta inapropiada hacia una empleada, las divisiones internas han afectado el rendimiento en pista. Red Bull es cuarto en el campeonato de constructores, y su segundo piloto ha quedado muy por detrás en puntos.
Aunque Horner fue apartado de sus funciones, técnicamente sigue siendo empleado de Red Bull y se encuentra en período de “licencia por jardinería”, que podría extenderse hasta finales de 2025. Según fuentes cercanas, Ferrari ya habría mostrado interés en contratarlo, aunque aún no hay confirmación de su próximo destino.
Steiner cree que no habrá apuro por regresar: “Estuvo al mando durante 20 años. Sé lo estresante que es dirigir un equipo. Los últimos años fueron duros. Todavía cobra, así que está disfrutando de su tiempo. No estará desesperado por un nuevo trabajo”.