¿Dónde reside el secreto de Red Bull? Más de uno recuerda ahora el ‘doble difusor’ del Brawn en 2009, que marcó una diferencia total. Los rivales fueron sorprendidos y para cuando pudieron copiar y poner en pista el truco, ya era tarde. Algo similar había sucedido en Renault en la era de los dos títulos de Fernando Alonso, con el ‘mass damper’, aunque a diferencia del doble difusor, el truco fue prohibido en verano de 2006.
Muchos señalan que la clave del Red Bull reside en el hecho de que puede ir muy bajo, más bajo que el resto de rivales, sin que ello suponga un problema.
Contra más bajo va el auto, más ‘downforce’ se genera por efecto suelo y para obtener una determinada carga aerodinámica puedes recurrir a un alerón más pequeño, mejor dicho, que ofrezca menor resistencia.
Pero para poder ir bajo debes dominar el ‘efecto marsopa’, evitar que el suelo toque al asfalto y colapse la corriente de aire bajo el auto. No es algo sencillo de conseguir, de ahí que muchos equipos hablen de la conveniencia de recuperar las suspensiones activas. Pero parece que la suspensión delantera del Red Bull consigue el efecto deseado. Tanto con mucha gasolina como con poca gasolina, la distancia al suelo permanece constante, pero sin tener que recurrir a unos reglajes excesivamente duros.
Charles Leclerc lo tiene claro: “Han encontrado alguna cosa. En algunas zonas su paso equivale a ganar un segundo por vuelta”. Está claro que la gran inclinación de los triángulos de suspensión delanteros no es un capricho y ello permite, de paso, que el tren trasero trabaje mejor y obtener una mejor tracción.
Pero hay un segundo aspecto que hace resaltar mucho más el auto. No degrada las gomas, al menos no como los restantes. Tras la Clasificación, sorprendió que Red Bull guardara un juego de blandos más que los restantes. Fueron los únicos que se permitieron usar dos juegos de blandos y sólo uno de duros en carrera. No sólo eso: también fueron los últimos en realizar la tercera parada —entre los autos que iban a tres paradas— y acabaron con los duros más frescos.
Hay quien sostiene que Red Bull podría haber ido todavía más deprisa, aumentar su ritmo de medio segundo o quizás de un segundo.
George Russell lo tiene claro. O hay una reacción, “o Red Bull puede ganar todos los Grandes Premios”. Es algo que todavía ningún equipo ha hecho.
Fuente: soymotor.com