- El mexicano, que el domingo se impuso en Montecarlo, ha formado una pareja muy competitiva con Max Verstappen
Ahora que Red Bull ha encontrado el complemento perfecto para Max Verstappen no era cuestión de dejarle escapar. La escudería de Milton Keynes (Gran Bretaña), campeona del mundo la temporada pasada con el neerlandés, oficializó este martes la renovación del contrato de Sergio Pérez, que inicialmente expiraba a finales de este año y que ahora tendrá vigencia hasta que termine el Mundial de 2024. El anuncio llega solo dos días después de que Pérez se adjudicara de forma magistral el Gran Premio de Mónaco, el domingo pasado, gracias a la brillante estrategia de Red Bull y al gatillazo de Ferrari, que lo hizo posible.
A sus 32 años, Checo acumula tres victorias en su palmarés, las últimas dos enfundado en el mono de la escudería energética, que le repescó con vistas a 2021, después de que Racing Point (actualmente Aston Martin), le dejara sin volante. “Para mí ha sido una semana increíble. Ganar en Mónaco es un sueño para cualquiera, y poder anunciar que seguiré en Red Bull hasta 2024 me hace muy feliz”, declaró el corredor de Jalisco, en el comunicado mandado por la estructura del búfalo rojo.
A ojos de su escudería, Pérez lo tiene todo. Por eso todo el paddock daba por hecho que la prolongación del vínculo podía darse por descontada. No es fácil encajar con un animal competitivo como Verstappen y mucho menos terminar las carreras cerca de él. Sin embargo, el corredor de Guadalajara ha logrado ambas cosas, hasta el extremo de convertirse en una pieza capital en la consecución del título celebrado el pasado ejercicio. “¡Checo es una leyenda!”, exclamó Verstappen en Abu Dabi, metido de lleno en el fragor de la batalla contra Lewis Hamilton, en agradecimiento por la labor de zapa que acababa de hacer Pérez, frenando al británico ante la llegada de Mad Max. “Hemos generado una inercia tremenda, y este curso lo estamos demostrando”, añade el piloto mexicano, que, gracias a su último triunfo, probablemente el más sonado de su vida, se ha situado a solo 15 puntos del líder (Verstappen) en la tabla de puntos.
“Checo no solo ha demostrado ser un magnífico jugador de equipo, sino que, a medida que se ha ido sintiendo más cómodo, también se ha convertido en uno de los pilotos más punteros de la parrilla”, le piropea Christian Horner, director de Red Bull. “Este año ha dado un paso más, y la diferencia con Max se ha reducido significativamente, como quedó claro en Yedda, donde logró la pole, y en Mónaco, con su última victoria”, expone el ejecutivo británico. “Por todo ello, mantenerle fue para nosotros una obviedad”, remacha Horner.
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