DoorDash presentó esta semana a Dot, un robot autónomo de entregas diseñado para operar en entornos suburbanos. Con 1,45 metros de altura, un peso de 159 kilos y capacidad para transportar hasta 13,6 kg, Dot puede alcanzar velocidades de 32 km/h y desplazarse por calles, aceras, ciclovías e incluso entradas residenciales.

El robot está pensado para recoger directamente en los restaurantes y entregar hasta la puerta del cliente, sin necesidad de montaje adicional. Su diseño incorpora ojos LED y saludos animados para mejorar la interacción con personas y personal de servicio. Actualmente, las primeras pruebas se realizan en el área de Phoenix, Arizona.

Dot forma parte de la Plataforma de Entrega Autónoma de DoorDash, que combina repartidores humanos, drones y robots según factores de costo, tiempo y ubicación. Su objetivo es cubrir un segmento logístico poco atendido: las entregas entre zonas residenciales.

Entre sus limitaciones, el robot no puede subir escaleras ni utilizar ascensores, y su circulación por carriles bici podría generar fricciones con ciclistas. Asimismo, cada operación estará sujeta a regulaciones locales y requisitos de seguridad.

Con Dot, DoorDash avanza hacia la creación de su propia división de logística autónoma, un paso que podría redefinir la forma en que se realizan entregas de comida, comestibles y pequeños productos en los próximos años.