El proveedor único de la Fórmula 1, Pirelli, inició en el circuito de Mugello un programa de dos días para desarrollar la nueva gama de neumáticos que debutará en la temporada 2026. La sesión inaugural estuvo marcada por la lluvia, lo que obligó a adaptar el plan de trabajo previsto junto a los equipos Haas y Ferrari.
Las pruebas buscan validar compuestos más duros y una nueva construcción más estrecha, que reducirá el ancho de los neumáticos en 25 mm en el eje delantero y 30 mm en el trasero, un cambio clave en el reglamento técnico que acompañará a los nuevos monoplazas de 2026.
En el primer día, Esteban Ocon y el joven británico Oliver Bearman rodaron con un monoplaza basado en el VF-24 equipado con los prototipos de Pirelli. Ocon completó 40 vueltas en seco, marcando un mejor tiempo de 1:21.943, mientras que Bearman, afectado por el asfalto mojado, tuvo que utilizar intermedios especialmente desarrollados, cerrando su tanda de 30 giros con un registro de 1:34.381.
La jornada también trajo una sorpresa: Romain Grosjean volverá a subirse a un Fórmula 1 este viernes en una TCP (prueba con coches de al menos dos años), organizada por Haas. El francés, que no competía en F1 desde su accidente en Baréin 2020, participará en la evaluación de los neumáticos en condiciones de pista cambiantes.
Con Ferrari programada para rodar en la segunda jornada, Pirelli continuará ajustando los compuestos antes de su homologación definitiva, un paso crucial para la próxima era de la Fórmula 1.