Tras su segundo puesto en el Gran Premio de Azerbaiyán, George Russell se ha consolidado como el único piloto de la parrilla de Fórmula 1 que no registra ni un solo abandono en toda la temporada 2025. En un año de transición para Mercedes, el británico no solo ha cumplido con las expectativas, sino que ha demostrado una capacidad excepcional para mantenerse en los puestos de vanguardia.
Russell acumula siete podios en 17 carreras, una cifra que lo coloca muy cerca de Max Verstappen, quien suma ocho desde el GP de Australia. En Bakú, el piloto de Mercedes supo aprovechar las oportunidades y escaló del quinto al segundo lugar, superando a rivales directos como Carlos Sainz, Kimi Antonelli y Liam Lawson.
Regularidad que marca la diferencia
La consistencia del británico cobra aún más relevancia en una temporada marcada por incidentes y abandonos entre los principales contendientes. Mientras Oscar Piastri se retiró en la primera vuelta de Bakú tras un toque con el muro, Russell mantuvo su racha perfecta y amplió su reputación como uno de los pilotos más fiables del paddock.
Incluso con un Mercedes W16 que ha enfrentado problemas técnicos —desde ajustes aerodinámicos hasta fallos eléctricos como los sufridos en Baréin—, Russell ha sabido exprimir el rendimiento del monoplaza. Su victoria en Canadá y la pole lograda en 2024 refuerzan un perfil de piloto capaz de responder en cualquier tipo de circuito.
Argumento clave en su renovación
El dato no es menor: Russell es el único de los 20 pilotos que ha completado todas las carreras de 2025. Esta regularidad llega en un momento crucial, ya que el británico se encuentra en plenas negociaciones para renovar su contrato con Mercedes, que expira a finales de la temporada.
En una Fórmula 1 donde cada punto cuenta y la fiabilidad se convierte en un arma tan importante como la velocidad, George Russell emerge como el hombre ideal para liderar la nueva etapa de las Flechas Plateadas.