La salida de Christian Horner de Red Bull sigue generando ecos y reacciones de peso en el mundo de la Fórmula 1. Esta vez, quien alza la voz es nada menos que Bernie Ecclestone, exjefe de la categoría y figura histórica del paddock, quien no oculta su desconcierto ante la decisión abrupta del equipo austríaco.
“¿Por qué despedirlo con efecto inmediato? Es como si hubiera asesinado a alguien”, lanzó Ecclestone en una entrevista con RacingNews365, cuestionando el momento y la forma en que se ha dado la desvinculación de Horner tras más de dos décadas de liderazgo en Red Bull Racing.
Un despido sin previo aviso
Ecclestone, de 93 años, reveló que mantuvo una conversación reciente con Horner, apenas dos días antes del anuncio oficial. “Hablé con él el lunes y no lo sabía. Bueno, quizá sí, pero no me lo dijo. Fue una charla normal, hablamos de Max [Verstappen]… nada fuera de lo común”, explicó. La noticia, entonces, cayó como un balde de agua fría para el exmandatario de la F1, como también lo ha sido para gran parte del paddock.
¿Qué hay detrás del despido?
Desde Red Bull no se han dado explicaciones detalladas. La única comunicación oficial indica que Horner ha sido “liberado de sus funciones con efecto inmediato”. El movimiento se produce tras un inicio de temporada por debajo de lo esperado para un equipo que ha dominado la última era híbrida, pero también tras un año cargado de rumores, tensiones internas y cuestionamientos sobre su liderazgo.
En particular, Ecclestone se muestra intrigado por la forma abrupta en que se dio el cese. “Cuando se toma una decisión así, lo normal es comunicarla como un acuerdo mutuo, o al menos suavizar la narrativa. Pero algo drástico debe haber pasado para que lo saquen de un día para otro”, aseguró.
¿Horner víctima del contexto?
La salida de Horner también coincide con la creciente incertidumbre en torno al futuro de Max Verstappen. Aunque el piloto neerlandés tiene contrato hasta 2028, los rumores de un posible pase a Mercedes se intensifican, especialmente después de los comentarios de Toto Wolff y los discretos resultados de Red Bull en las últimas carreras.
Algunos analistas no descartan que la caída de Horner sea consecuencia de tensiones internas relacionadas con la figura de Verstappen, quien ha evitado comprometerse públicamente a largo plazo con el equipo.
Un vacío difícil de llenar
El británico deja un legado imponente: 14 títulos combinados entre pilotos y constructores, y una marca indeleble en la historia reciente de la F1. Su reemplazo, Laurent Mekies, tiene por delante el enorme reto de mantener al equipo competitivo mientras Red Bull transita hacia una nueva era con unidad de potencia propia para 2026.
Por ahora, la F1 se queda con más preguntas que respuestas. Y como resume Bernie Ecclestone, fiel a su estilo directo: “Si Horner se va así, debe haber algo más detrás. Lo sabremos pronto”.