Oscar Piastri parecía tener todo bajo control en Silverstone. Había liderado buena parte del Gran Premio de Gran Bretaña y estaba en camino a sumar su segunda victoria en Fórmula 1. Pero todo cambió tras una decisión de los comisarios que terminó costándole la carrera: una penalización de 10 segundos por “conducción errática” durante la reanudación tras el coche de seguridad. ¿Qué pasó exactamente?

Infografía: aws.e

El momento clave: vuelta 21

Después de una neutralización por el coche de seguridad, las luces se apagaron al final de la vuelta 21, lo que indicaba que el líder —en este caso, Piastri— debía marcar el ritmo para el reinicio. Sin embargo, justo en ese instante, el australiano pisó los frenos de forma brusca y repentina, reduciendo su velocidad en más de 160 km/h en plena recta, con piso mojado y visibilidad limitada.

Max Verstappen, que venía segundo, se vio sorprendido por esta maniobra y terminó adelantándolo brevemente, aunque luego levantó el pie para devolver la posición. Pero los comisarios no dejaron pasar el incidente.

¿Por qué fue penalizado?

La frenada de Piastri fue considerada peligrosa por dos razones: la intensidad (una presión de 59,2 psi en el pedal de freno) y el momento en que ocurrió —justo cuando todos los autos estaban muy juntos. Este tipo de acción puede generar accidentes en cadena, como ya ocurrió en Mugello en 2020, cuando una frenada similar provocó un múltiple choque tras el coche de seguridad.

Según las nuevas directrices de la FIA publicadas a fines de junio, cualquier “conducción errática” durante una reanudación puede ser penalizada con hasta 10 segundos y puntos en la Superlicencia. Y eso fue lo que aplicaron: 10 segundos de penalización y dos puntos en su licencia.

¿Y en Canadá con Russell y Verstappen?

Muchos compararon esta maniobra con la de George Russell en el GP de Canadá, donde Max Verstappen también lo superó involuntariamente tras una frenada. Pero las condiciones no eran las mismas: en esa ocasión, la presión de freno fue de apenas 30 psi, casi la mitad de la aplicada por Piastri en Silverstone.

Un final frustrante

Piastri se mostró visiblemente molesto tras la carrera. “No voy a decir mucho… si no, me meteré en problemas”, comentó. Y no es para menos: perdió una victoria que parecía suya. Además, sus intentos de que el equipo aplicara órdenes de equipo a favor suyo no prosperaron, lo que sumó a su frustración.

El australiano tendrá una nueva oportunidad en Spa, donde el año pasado estuvo cerca de ganar. ¿Buscará revancha con lluvia incluida?