A lo largo de la historia, los mundos del rally y la Fórmula 1 han mantenido caminos paralelos, separados por la precisión quirúrgica del asfalto y la furia impredecible de los tramos de tierra. Pero en ocasiones, esos caminos se cruzan.
Y aunque es un club muy exclusivo, varios campeones del WRC han tenido la oportunidad —y el privilegio— de ponerse al volante de un monoplaza de F1, al menos por un día.
De Jean Ragnotti a Kalle Rovanperä, estos son los pilotos de rally que se atrevieron a sentir la velocidad pura de un Fórmula 1.
Jean Ragnotti — Renault y Williams
📍 1980, 1983, 1989, 1993
El carismático piloto francés, ícono del rally con Renault, fue uno de los primeros en disfrutar esta experiencia.
En 1980, probó el Renault RE20 turbo en Paul Ricard, y repitió la hazaña en 1983 con el RE30C en Jyllandsringen (Dinamarca).
Años después, en 1989, se subió a un Williams FW12B Renault, y en 1993 cerró el ciclo con el FW15, uno de los monoplazas más avanzados de su época. Cuatro décadas de historia entre dos mundos unidos por la pasión francesa por la velocidad.
Colin McRae — Jordan 195 (1996)
📍 Silverstone
El campeón del mundo en 1995 cambió los saltos del WRC por las curvas planas de Silverstone.
Durante una prueba privada, Colin McRae condujo el Jordan 195 con motor V10. No fue una sesión cronometrada, pero sí suficiente para que el escocés demostrara su instinto natural al volante… incluso en un auto sin margen para el error.
Sébastien Loeb — Red Bull RB4 (2008)
📍 Barcelona y Silverstone
El piloto más laureado del WRC no podía quedarse fuera.
En 2008, Sébastien Loeb probó el Red Bull RB4 en Barcelona y Silverstone, el mismo monoplaza con el que el equipo compitió en la temporada de F1 de ese año. Su ritmo fue tan competitivo que llegó a considerarse su participación en un GP oficial, algo que finalmente no ocurrió por cuestiones reglamentarias.
Petter Solberg — Ferrari F2005 (2009)
📍 Fiorano
El campeón noruego de 2003 vivió una jornada inolvidable en la sede de Ferrari.
En 2009, Petter Solberg se puso al volante del Ferrari F2005, un monoplaza que había sido conducido por Michael Schumacher y Rubens Barrichello. En el circuito privado de Fiorano, disfrutó de un día completo dentro del universo Ferrari, entre el rugido del V10 y la historia viva de Maranello.
Tommi Mäkinen — Williams FW19 (1998)
📍 Barcelona
El tetracampeón del mundo finlandés, Tommi Mäkinen, también cumplió su sueño de Fórmula 1 en 1998.
Probó el Williams FW19, monoplaza campeón de 1997 con Jacques Villeneuve, en el circuito de Montmeló. En esa jornada, compartió pista con el múltiple campeón de motociclismo Mick Doohan, que también se animó a sentir la potencia de un F1.
Sébastien Ogier — Red Bull RB7 (2017)
📍 Red Bull Ring, Spielberg
En 2017, Sébastien Ogier vivió un día muy especial en el circuito austriaco del Red Bull Ring, donde pilotó el RB7 campeón del mundo con Sebastian Vettel en 2011.
Con su habitual precisión y elegancia, el francés disfrutó de una jornada de pruebas que reafirmó su versatilidad: del control sobre grava al control absoluto en pista.
Kalle Rovanperä — Red Bull RB8 (2024)
📍 Red Bull Ring, Spielberg
El joven prodigio finlandés y campeón del mundo del WRC 2023 cerró el círculo en 2024, al ponerse al volante del Red Bull RB8, el coche que llevó a Vettel a su tercer título mundial.
Su prueba, también en el Red Bull Ring, simbolizó el vínculo entre generaciones: la velocidad pura no entiende de disciplinas, solo de talento.
Dos mundos, una misma pasión
De los tramos helados de Finlandia a los circuitos de alta precisión, los pilotos de rally que han probado un Fórmula 1 forman parte de una pequeña pero fascinante intersección del automovilismo.
Cada uno de ellos llevó consigo algo más que curiosidad: demostraron que el talento, cuando es genuino, trasciende cualquier superficie.
