Tras un periodo de tensiones internas y estrategias controvertidas, Jeep entra en una nueva etapa bajo el liderazgo de Bob Broderdorf como CEO de la marca y Antonio Filosa al frente de Stellantis. El objetivo: recuperar la esencia del fabricante y corregir decisiones que afectaron sus ventas en los últimos años.
Broderdorf fue directo en su mensaje durante una presentación en Detroit: “Nos hemos propuesto corregir algunos de los errores de nuestro pasado”. Entre las prioridades, destacó la reestructuración de precios para volver a ser competitivos en todos los segmentos. “Invito a cualquier cliente que haya buscado un Jeep hace un año a que vuelva y compruebe lo competitivos que son nuestros precios”, subrayó.
El regreso del músculo y la personalización
Uno de los anuncios más celebrados fue el retorno del motor Hemi V8 de 6.4 litros en el Wrangler 392, modelo que estaba programado para desaparecer. Jeep no solo mantendrá esta mecánica, sino que planea ampliar su disponibilidad e integrar versiones más potentes en otros modelos de la gama. El Gladiator también podría beneficiarse de esta estrategia, aunque no se confirmó si recibirá un Hemi o mejoras en el Pentastar V6.
La nueva dirección quiere que el Wrangler y el Gladiator sean más personalizables, con más colores, opciones estéticas y configuraciones mecánicas. “Vamos a devolverle al cliente la posibilidad de personalizarlo, donde corresponde”, afirmó Broderdorf.

Siete lanzamientos en siete meses
La marca prepara una ofensiva global con siete modelos nuevos en los próximos siete meses. Entre ellos, el Jeep Cherokee híbrido de nueva generación, los renovados Grand Wagoneer y Grand Cherokee, y el Recon, el primer SUV eléctrico de batería de Jeep diseñado para uso todoterreno. También llegarán el Compass para Europa, el Commander para Oriente Medio y el Avenger para Sudamérica.
En paralelo, Jeep invertirá 3.000 millones de dólares para fortalecer su gama y su posicionamiento. Solo en 2024, ya ha ejecutado más de 40 acciones de producto, la mitad de las cuales están en el mercado.
Ventas mixtas, pero optimismo renovado
Pese al entusiasmo, los números aún no muestran una recuperación total: las ventas de Jeep en EE. UU. cayeron un 5% en el primer semestre, aunque modelos como el Compass, Wrangler y Gladiator registraron incrementos. Los más afectados fueron el Wagoneer y el Grand Wagoneer, con descensos superiores al 50%.
Con precios reajustados, una oferta más amplia y el regreso de iconos mecánicos, Jeep apuesta por reconectar con sus clientes más fieles y atraer a nuevos compradores. La estrategia está en marcha, y 2025 será clave para comprobar si el plan logra devolverle a la marca el ritmo que la convirtió en un referente del todoterreno.