En una carrera dominada durante su primera mitad por los Ford del Team Penske y RFK Racing, William Byron se impuso con estrategia y eficiencia en el Iowa Speedway para sumar su segunda victoria de la temporada 2025 en la NASCAR Cup Series.
El piloto del Chevrolet #24 de Hendrick Motorsports, que ya había ganado en las 500 Millas de Daytona a inicios de año, se llevó el triunfo gracias a un último stint de 144 vueltas sin repostar, aprovechando cada bandera amarilla para maximizar el ahorro de combustible. Una jugada arriesgada pero efectiva, en un circuito donde lo habitual es detenerse cada 100 vueltas.
“¡Eso es ahorro de combustible!”, exclamó Byron tras cruzar la meta. “Ha sido un año difícil, con muchos problemas al comienzo. Pero todo el equipo, Rudy [Fugle, jefe de equipo], los ingenieros… todos han trabajado muy duro para que esto fuera posible. Hoy valió la pena”.
Byron se mantuvo al frente incluso durante los múltiples reinicios que marcaron el final del segundo segmento. Las banderas amarillas fueron constantes, y cada una generó caos en el pelotón, dando lugar a intensas luchas y cambios de estrategia. Pero Byron, con una conducción limpia y controlada, supo defender su posición ante rivales como Chase Briscoe (Joe Gibbs Racing), Brad Keselowski (RFK Racing) y Ryan Blaney (Team Penske), quienes intentaron diferentes enfoques sin éxito.

Con este resultado, Byron recupera el liderato del campeonato, superando a su compañero de equipo Chase Elliott. A solo tres carreras del cierre de la temporada regular, cada punto cobra un valor crucial: el líder al final de las 26 fechas iniciales recibe una bonificación de 15 puntos para los playoffs, frente a los 10 del segundo.
La próxima parada será este fin de semana en el desafiante circuito de Watkins Glen, en el estado de Nueva York, donde el pulso por los puntos de playoffs promete seguir al rojo vivo.