El futuro equipo estadounidense continúa estructurándose antes de su llegada a la parrilla a principios de 2026, desvelando una asociación con Tommy Hilfiger, ex socio de Mercedes.
Guanyu Zhou, Sergio Pérez, Valtteri Bottas, Colton Herta… Los nombres de los futuros pilotos del equipo Cadillac F1 siguen siendo, por el momento, un misterio y objeto de mucha especulación. Si bien aún se desconoce la identidad de los dos elegidos, ya sabemos quiénes los conducirán.
Cadillac ha formalizado una alianza con la marca de ropa Tommy Hilfiger, convirtiéndose en su primer socio oficial. Fundada por el diseñador homónimo, la marca estadounidense mantiene una larga conexión con la Fórmula 1 —una pasión de su creador— a través de colaboraciones con Lotus, Ferrari y Mercedes, hasta el año pasado. También está asociada con la película de F1, que se estrenará en cines el 25 de junio y para la que se ha lanzado una colección especial, así como con la Academia de F1, donde Alba Larsen conduce un monoplaza con los colores de la marca.
La fusión entre Cadillac y Tommy Hilfiger, dos entidades icónicas de la cultura estadounidense, convierte a la marca en el proveedor oficial de ropa para los pilotos y en el patrocinador de estilo de vida del equipo.
“Dos íconos. Una visión. Una nueva era audaz para el automovilismo estadounidense”, afirma con entusiasmo Tommy Hilfiger. “Nos enorgullece continuar nuestra historia en la Fórmula 1 junto con TWG Motorsports y Cadillac. Compartimos el compromiso de honrar la herencia de la F1 y proyectarla hacia el futuro, celebrando nuestras raíces y reinventando nuestro destino. Con el crecimiento global de la Fórmula 1, nunca ha habido un mejor momento para soñar en grande y mostrarle al mundo lo que un equipo estadounidense puede aportar a la parrilla”.
Somos un equipo estadounidense que representa a una de las marcas más emblemáticas del país”, declaró Graeme Lowdon, director del equipo Cadillac F1. “Tommy Hilfiger también es un ícono, y su trayectoria en la Fórmula 1 es inigualable. Al aportar una visión audaz al paddock, esta alianza captura a la perfección el espíritu de lo que estamos construyendo. Juntos, no solo competimos, sino que innovamos para dar forma al futuro del deporte y la ingeniería”.
Antes de conocer mejor los contornos precisos del proyecto Cadillac, esta primera colaboración ya marca la pauta: una clara ambición de rodearse de nombres fuertes capaces de brindar apoyo estratégico, financiero y operativo. Este es el primer paso en la construcción de un equipo que pretende ir más allá de ser una simple figura decorativa.
