En una medida destinada a adaptarse al cambiante entorno comercial centrado en aranceles, se dice que el fabricante alemán de automóviles de lujo Audi está ajustando sus planes de producción para reducir su exposición a las políticas establecidas por la Administración Trump. Según un nuevo informe de Automotive News y su filial alemana, Automobilwoche, Audi podría utilizar los activos de fabricación del Grupo VW en Estados Unidos para fabricar sus vehículos.
En la actualidad, la mayor parte de la línea estadounidense de Audi se importa de México y Europa, un problema que podría significar dificultades para el fabricante de automóviles, ya que los impuestos del 25 % entraron en vigencia el 3 de mayo.
Fuentes informaron al medio que Audi podría fabricar el crossover eléctrico compacto Q4 E-tron en la planta de VW en Chattanooga, Tennessee, mientras que la producción del Q8 E-tron, de mayor tamaño, podría trasladarse de México a la planta Scout, próxima a completarse, en Columbia, Carolina del Sur. También señalaron que Audi está buscando una posible planta en EE. UU. para fabricar el Q6 E-tron.
En un comunicado al medio, Audi no confirmó ningún plan para trasladar la producción a Estados Unidos. Sin embargo, reiteró que Estados Unidos es su “tercer pilar global” en su estrategia de crecimiento global, junto con Europa y China.
“Queremos aumentar nuestra presencia en EE. UU.”, declaró el portavoz. “Actualmente estamos analizando diversos escenarios. Confiamos en poder decidir los detalles específicos en consulta con el Grupo antes de que finalice este año”.