El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunciará nuevos aranceles a China la próxima semana dirigidos a sectores estratégicos, incluidos los vehículos eléctricos , según dos personas familiarizadas con el asunto.

Se espera que el anuncio completo, que podría tener lugar el martes, mantenga en gran medida los impuestos existentes, según una de las personas. Un anuncio también podría retrasarse, afirmó la persona.

Según una de las personas, también se prevé que sectores específicos incluyan semiconductores y equipos solares.

Los detalles sobre el valor preciso o las categorías de los aranceles que se impondrían eran vagos, pero se dijo que la administración se había centrado en áreas de interés dentro de áreas estratégicas competitivas y de seguridad nacional, dijo una de las personas.

La oficina del Representante Comercial de Estados Unidos hizo sus recomendaciones a la Casa Blanca hace semanas, pero el anuncio final se retrasó mientras el paquete se debatía internamente, según una de las fuentes y otra persona familiarizada con el asunto.

Biden, un demócrata que busca la reelección en noviembre, trata de contrastar su enfoque con el del candidato republicano Donald Trump, quien ha propuesto aranceles generales que los funcionarios de la Casa Blanca consideran demasiado directos y propensos a provocar inflación.

La Casa Blanca y la oficina del Representante Comercial de Estados Unidos declinaron hacer comentarios. Bloomberg News informó por primera vez la historia.

Las medidas podrían provocar represalias por parte de China en un momento de intensas tensiones entre las dos economías más grandes del mundo. La imposición más amplia de aranceles por parte de Trump durante su presidencia de 2017-2021 provocó la represalia de China con sus propios impuestos.

Biden ha dicho que no quiere una guerra comercial con China, incluso cuando ha dicho que los países han entrado en un nuevo paradigma de competencia.

Ambos candidatos para 2024 se han alejado marcadamente del consenso de libre comercio que una vez reinó en Washington, un período que culminó con la adhesión de China a la Organización Mundial del Comercio en 2001.

En 2022, Biden lanzó una revisión de la política de la era Trump bajo la Sección 301 de la ley comercial estadounidense. El mes pasado, pidió aranceles estadounidenses mucho más altos sobre los productos metálicos chinos, pero los productos objetivo eran de alcance limitado, estimado en más de mil millones de dólares en productos de acero y aluminio, dijo un funcionario estadounidense.

Biden también anunció el inicio de una investigación sobre las prácticas comerciales chinas en los sectores de construcción naval, marítimo y logístico, un proceso que podría conducir a más aranceles.

La administración Biden también ha estado presionando al vecino México para que prohíba a China vender sus productos metálicos a Estados Unidos indirectamente desde allí.

China ha dicho que las medidas arancelarias son contraproducentes y causan daño a Estados Unidos y a la economía mundial.